Y llegó el martes de Panchitada,
¿Qué se nos ocurre?
¡Ir de playa!
Los más peques del CEIP. Pancho Cossío, estamos deseando descubrir pasito a pasito el entorno que nos rodea a través del juego, de la experimentación y de los sentidos. Iniciamos este viaje Deme, Carmen y Belén, ¿nos acompañáis?
Y llegó el martes de Panchitada,
¿Qué se nos ocurre?
¡Ir de playa!
Ayer, lunes 15, nos visitó Belén, la mami de Lines.
¡Vaya artistaza!
Nos enseñó un instrumento musical: la pandereta,
y compartió con nosotros, las panderetas de toda la familia.
aunque ella lo niegue, da gusto escucharla tocar y cantar.
Nos enseñó con qué se hacían las panderetas, cómo tensarlas,
cómo sonaban, diferentes canciones...
Y por si fuera poco,
también nos mostró como podíamos hacer música con nuestras manos
y las cucharas,
o con la mesa y nuestras manos.
Incluso hicimos nuestros pinitos con la canción de la castaña,
Si queréis fisgar un poco más, en la foto de la banda a cliquear.
¡NOS ENCANTÓ!
¡Ya sabéis que os esperamos con ilusión!
Ha sido un gustazo volver a encontrarnos.
Parece que venimos con fuerza y mucho más cariñosos, o quizás es que nos hemos añorado durante estas vacaciones, quien sabe...
Han vuelto los desayunos compartidos,
(podéis en la foto clickear)
¡Con Bubo en clase, no se sabe qué puede pasar!
Primero nos trae un montón de hojas de su bosque,
y su camita nido, para que sepamos cómo es la casita de algunas aves.
Deme nos trae un cuentito de su casa,
para ver cómo hacen sus casitas algunas aves.
Los cuentos y los libros nos dan muchas informaciones,
es bueno ir a ellos a buscar cuando queremos saber algo.
Otro día, aparecen muchos de sus amigos a oscuras...,
pero cuando llegan ellos, ¡DESAPARECEN LAS HOJAS!
¡Que faena, se sienten tristes, añoran su bosque!
¿Qué podemos hacer? Bubo nos da una pista...
necesitan hojas, piedras, piñas, árboles, para poder vivir.
¡YA TENEMOS UN RETO: crearles un pequeño bosque!
En nuestros paseos con las familias y por el cole,
encontramos: piedras, ramas, avellanas, nueces, castañas y su erizo, piñas...
Con todo ello montamos un bosquecillo,
que les gusta tanto, tanto a los animalillos,
que se corre la voz y llegan también duendes y
nos convertimos también nosotras en duendecillas.
¡Y aparece una casa!
Cómo los árboles de nuestros frutos, son muy grandes,
aparecen fotos, para que les conozcamos y nos den una pista
para poder buscarlos en libros o en el ordenador.
¡UYYYY, LOS ANIMALES ESTÁN FELICES,
YA TIENEN BOSQUE!
¡RETO CONSEGUIDO!
Pero creo que este bosque nos va a dar más sorpresas...
Otro día, los plásticos que "algunos tiran en cualquier sitio",
han atrapado a nuestros amigos. Menos mal, que somos muy hábiles,
y con nuestros deditos hemos sido capaces de desenvolverles del lío que tenían montado
y les hemos salvado.
¡HAY QUE CUIDAR A LOS ANIMALES, NUESTROS BOSQUES,
ÁRBOLES Y PLANTAS!
Bubo, se muestra tan contento, que nos gasta algunas bromitas,
y cuando las avellanas, las hojitas, las castañas, los palos y las bellotas,
se quieren ir cada una a su casita, nos las lía todas...
Toda nuestra vida estamos decidiendo,
unas decisiones serán importantes, otras no mucho y otras cruciales.
El decidir nos ayuda a tomar confianza, autoestima
y seguridad en nosotras, a ir descubriendo nuestras preferencias y nuestros intereses, a conformarnos.
Por lo tanto, deberíamos intentar enseñar estrategias
para poder decidir desde pequeñitos.
Desde estas edades hay cosas que se pueden decidir y cosas que no.
Pero para aprender a hacerlo, hay que DEJAR DECIDIR.
Mostrando los pros y los contras,
y siendo consecuentes con nuestras decisiones,
por pequeñas que sean.
Cuando escogemos algo, casi siempre renunciamos a otra cosa
y eso es difícil, para ellos y para nosotros.
No les sobre protejamos cuando lo hacen,
y si se equivocan, aprendamos del error.
En el aula desde que entramos hasta las 10:00,
nuestras criaturas son las que deciden: a qué jugar, con quién, como, qué actividad, dónde la van a llevar a cabo, etc.
Nuestro papel es que dispongan de variedad de materiales y espacios para satisfacer variedad de necesidades, intereses gustos o preferencias.
Así como de invitar o preparar situaciones que les puedan provocar emociones.
Pero son ellos y ellas quienes eligen qué hacer.
De 10:00 a 11:00 las actividades son dirigidas,
al menos parte de ellas.
No siempre van a poder decidir y ellos han de ser conscientes de cuándo sí y cuando no.
Actualmente el desayuno también deciden ellos,
si quieren sentarse a la mesa, y de las frutas que tenemos,
cuáles queremos ese día.
A quienes no les apetece,
pueden decidir pero entre unas actividades tranquilas
y un espacio más limitado como es la colchoneta.
A la hora del recreo hay días en los que todos salen al patio,
o que se da a elegir entre el patio y el espacio aula.
O cuando llueve, entre el aula y la sala de toboganes,
incorporándose a veces el pasillo.
Por ello, es muy raro que nos veáis,
haciendo a todos lo mismo.
No todos pasamos el mismo tiempo en el cole,
ni necesitamos los mismos tiempos para animarnos a hacer actividades,
ni nos gusta sentirnos observados (en muchas ocasiones si la cámara interrumpe el juego, prescindo de la cámara).
¿Queréis ver un poco más?
en la foto a clickear.
Enseñar a tomar decisiones es enseñar a pensar.
No paramos de movernos.
A veces nos tenemos que adaptar a espacios pequeños,
muy pequeños, o amplios escenarios.
El gimnasio sigue siendo una zona del cole
que disfrutamos mucho.
Cada vez que llegamos, encontramos materiales diferentes,
invitaciones a distintos tipos de juego...
En ocasiones con materiales propios y facilitadores de la motricidad gruesa.
Pinchar, que Aiden os lo enseña...
que dejan volar nuestra imaginación.
En el espacio vacío, también es necesario moverse libremente.
¡NO DEJÉIS DE MOVEROS ESTAS VACACIONES!