Cada día es una vivencia, una sorpresa.
En esta ocasión, apareció una mini playa,
solamente con arena
(pan rallado, hay que cuidar nuestros ecosistemas y no llevarse la arena de las playas).
Pensar y pensar, es muy importante,
dejarles que hagan hipótesis, que se esfuercen,´
no dar las soluciones con prontitud.
Ellos mismos vieron que nos faltaba el agua en la playa, el mar.
A ratos jugamos con el agua real,
pero en esta ocasión decidimos hacer agua de juguete,
¿Y cómo?
Pintando con témpera y vinagre, arroz y alubias.
A Bubo le encantó la mini playa,
y llamó a sus amiguitos del mar para que nos vinieran a visitar.
¿Queréis verlo? pues a clickear.
Después de dos o tres semanas, la playa desapareció.
Y cual fue nuestra sorpresa que esta semana,
la clase se quedó a oscuras,
y según Martín, el Trastolillo está de nuevo aquí.
Necesitábamos nuestras linternas, y al entrar a explorar,
encontramos muchos más animales del mar,
¡y nos encontramos dos juegos de pescar!
Si queréis fisgar en la foto a clickear.
Y como todos nos vamos marchando ya,
a las mariposas también les tocó el volar.
Guardamos sus huevitos, y la primavera que viene se verá.
Jugamos con los muñequitos del ciclo vital que tan maravilloso,
hemos podido vivenciar, y también conocimos el de las ranitas y los sapos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario